“Nada hará que supere el daño que le hicieron”
JEFE DE LA POLICÍA REVELA QUE CRIMEN DE MAESTRA YA FUE RESUELTO
Santo Domingo
“Yo no quiero que las personas que mataron a mi hija Giokonda Pérez mueran como ella, sino que las autoridades realicen esfuerzos para concientizarlos, para que de esa manera esos jóvenes hagan una reflexión y sepan que lo que están haciendo está causando daños irreparables a la nación dominicana”, expresó cabizbajo Agapito Pérez, padre de la maestra embarazada que fue asesinada por desaprensivos el pasado sábado en Villa Mella para despojarla de un celular.
Visiblemente afectado por la insuperable muerte de su hija menor, la cual se graduó de magisterio en la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PUCMM), con tan solo 19 años, y que cursaba una maestría en la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), Agapito Pérez entiende que el Gobierno debe implementar estrategias para concientizar a los jóvenes del país, porque de lo contrario la situación “nos llevará a ser un Estado terrorista, donde los ciudadanos toman la justicia en sus manos”.
Expresó que ya no le interesa pensar en el daño que provocaron a su familia las personas que le quitaron la vida a su hija, porque nadie hará que lo puedan superar, a pesar de eso, Agapito desea que las personas que le arrebataron la vida cambien de parecer, que salgan de la calle y se conviertan en personas productivas y dejen de ser salvajes “porque ni los animales se atacan unos a los otros”.
“Somos nosotros los seres humanos que hemos degradado ese valor que todavía existe en el reino animal. Los osos no se atacan entre ellos mismos, los lobos tampoco, y los perros se atacan entre ellos y es por asuntos sexuales, pero de lo contrario no lo hacen. El ser humano ha decaído sobre esa situación”, lamentó.
Durante una visita al Politécnico Cardenal Sancha, centro educativo donde Agapito labora como Coordinador Pedagógico y donde su hija fue maestra durante tres años, el padre de la hoy occisa expresó que a pesar de todo cree en la justicia, cree en la Policía y en todas las instituciones que puedan ayudar a generar un proyecto para buscar soluciones, para que de esa manera cambiar la vida de los jóvenes que están en la calle, que su vida es matar, atracar, consumir drogas, entre otros actos ilícitos.
Su propuesta
Entiende que una forma de concientizar a los jóvenes que andan cometiendo actos delictivos en el país sería a través de la Junta Central Electoral (JCE), para que esa entidad pueda localizar a todos los jóvenes en edades de 12 a 25 años que no estudian ni trabajan para que el Gobierno pueda darles seguimiento y lograr que puedan ocupar su tiempo en actividades de provecho.
“En el país ya existe la plataforma donde se conoce la trayectoria de los estudiantes. Se les debe de dar seguimiento a los jóvenes para que no estén haciendo lo que ellos quieran. Si un estudiante se va de una escuela inmediatamente debe aparecer inscrito en otra, y si no es así, el Ministerio de Educación debe darle seguimiento para saber qué es lo que está haciendo ese estudiante”, consideró.
A su juicio, el país solo necesita voluntad para resolver ese problema, porque a partir de ese momento inmediatamente aparecerán los recursos y el lugar donde se ubicarán los jóvenes, se sabrá qué se hará con ellos y cómo los comprometerán con buenas actividades.
“No podemos hacer lo que están haciendo las cárceles, un asilamiento de personas, donde muchas veces entran y salen convertidos en delincuentes”, expresó.
Se deben crear métodos para que el país sepa qué se hace con esos estudiantes que abandonan las escuelas y viven una vida salvaje.
(+)
POLICÍA CAPTURA A LOS ASESINOS DE LA MAESTRA
La Policía Nacional resolvió anoche el crimen de la maestra Giokonda Pérez capturando a las dos personas que participaron en el hecho.
Uno de ellos se entregó a las autoridades, mientras que el otro eran de los 17 sospechosos que estaban bajo investigación por el cuerpo uniformado.
Según el organismo policial, los dos acusados de dar muerte a la docente en estado de gestación, se culpan de haber hecho el disparo con la pistola 3.80 Mms.
El cuerpo armado también dijo que buscan otro revólver que al parecer fue usado en el asesinato de la profesora.
Pérez fue asesinada por dos individuos a bordo de un motor para despojarla de su celular.
Santo Domingo
“Yo no quiero que las personas que mataron a mi hija Giokonda Pérez mueran como ella, sino que las autoridades realicen esfuerzos para concientizarlos, para que de esa manera esos jóvenes hagan una reflexión y sepan que lo que están haciendo está causando daños irreparables a la nación dominicana”, expresó cabizbajo Agapito Pérez, padre de la maestra embarazada que fue asesinada por desaprensivos el pasado sábado en Villa Mella para despojarla de un celular.
Visiblemente afectado por la insuperable muerte de su hija menor, la cual se graduó de magisterio en la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PUCMM), con tan solo 19 años, y que cursaba una maestría en la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), Agapito Pérez entiende que el Gobierno debe implementar estrategias para concientizar a los jóvenes del país, porque de lo contrario la situación “nos llevará a ser un Estado terrorista, donde los ciudadanos toman la justicia en sus manos”.
Expresó que ya no le interesa pensar en el daño que provocaron a su familia las personas que le quitaron la vida a su hija, porque nadie hará que lo puedan superar, a pesar de eso, Agapito desea que las personas que le arrebataron la vida cambien de parecer, que salgan de la calle y se conviertan en personas productivas y dejen de ser salvajes “porque ni los animales se atacan unos a los otros”.
“Somos nosotros los seres humanos que hemos degradado ese valor que todavía existe en el reino animal. Los osos no se atacan entre ellos mismos, los lobos tampoco, y los perros se atacan entre ellos y es por asuntos sexuales, pero de lo contrario no lo hacen. El ser humano ha decaído sobre esa situación”, lamentó.
Durante una visita al Politécnico Cardenal Sancha, centro educativo donde Agapito labora como Coordinador Pedagógico y donde su hija fue maestra durante tres años, el padre de la hoy occisa expresó que a pesar de todo cree en la justicia, cree en la Policía y en todas las instituciones que puedan ayudar a generar un proyecto para buscar soluciones, para que de esa manera cambiar la vida de los jóvenes que están en la calle, que su vida es matar, atracar, consumir drogas, entre otros actos ilícitos.
Su propuesta
Entiende que una forma de concientizar a los jóvenes que andan cometiendo actos delictivos en el país sería a través de la Junta Central Electoral (JCE), para que esa entidad pueda localizar a todos los jóvenes en edades de 12 a 25 años que no estudian ni trabajan para que el Gobierno pueda darles seguimiento y lograr que puedan ocupar su tiempo en actividades de provecho.
“En el país ya existe la plataforma donde se conoce la trayectoria de los estudiantes. Se les debe de dar seguimiento a los jóvenes para que no estén haciendo lo que ellos quieran. Si un estudiante se va de una escuela inmediatamente debe aparecer inscrito en otra, y si no es así, el Ministerio de Educación debe darle seguimiento para saber qué es lo que está haciendo ese estudiante”, consideró.
A su juicio, el país solo necesita voluntad para resolver ese problema, porque a partir de ese momento inmediatamente aparecerán los recursos y el lugar donde se ubicarán los jóvenes, se sabrá qué se hará con ellos y cómo los comprometerán con buenas actividades.
“No podemos hacer lo que están haciendo las cárceles, un asilamiento de personas, donde muchas veces entran y salen convertidos en delincuentes”, expresó.
Se deben crear métodos para que el país sepa qué se hace con esos estudiantes que abandonan las escuelas y viven una vida salvaje.
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POLICÍA CAPTURA A LOS ASESINOS DE LA MAESTRA
La Policía Nacional resolvió anoche el crimen de la maestra Giokonda Pérez capturando a las dos personas que participaron en el hecho.
Uno de ellos se entregó a las autoridades, mientras que el otro eran de los 17 sospechosos que estaban bajo investigación por el cuerpo uniformado.
Según el organismo policial, los dos acusados de dar muerte a la docente en estado de gestación, se culpan de haber hecho el disparo con la pistola 3.80 Mms.
El cuerpo armado también dijo que buscan otro revólver que al parecer fue usado en el asesinato de la profesora.
Pérez fue asesinada por dos individuos a bordo de un motor para despojarla de su celular.
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