Derechos de todos
La educación sobre este tema resulta primordial para que haya un cambio en la sociedad. Hoy el mundo celebra el Día Internacional de los Derechos Humanos.
Santo Domingo
Conocer los derechos humanos (DDHH) y apropiarse de ellos cambia a las personas. Así lo han comprobado Luisa de Peña y Francisco Cabral, directora general y facilitador, respectivamente, del Museo Memorial de la Resistencia, institución que promueve los DDHH y organiza cursos y talleres sobre el tema.
De Peña narra la anécdota de un empleado de conserjería que, tras la captura y apresamiento de dos carteristas en las instalaciones del museo, se dirigió al destacamento policial a poner la denuncia junto a otra empleada. Ya en el lugar, y al ver el trato vejatorio dado a los delincuentes, el empleado dio a quienes se encontraban en el destacamento una “charla” sobre DDHH.
“Eso -comenta De Peña sobre el episodio- quiere decir que él absorbió dentro de sí sus derechos y no tiene miedo de expresar y promover esos derechos en un lugar que es uno de los centros de mayores violaciones de derechos”.
Cabral, por otro lado, recuerda el caso de personas que llegan a los cursos de DDHH con un conocimiento prácticamente nulo sobre el tema y al finalizar las lecciones tienen la capacidad de analizar los hechos que los rodean y determinar qué derechos han sido violentados en cada caso. Se trata, dice, de un primer paso que los prepara para exigir sus derechos cuando deban hacerlo.
“Es sumamente importante que las personas conozcan qué son los DDHH, sobre todo porque son las herramientas básicas para defendernos en cualquier conflicto, mantener la paz y promover el bienestar”, afirma Cabral.
Desconocimiento
Contenidos en la Declaración Universal de los Derechos Humanos aprobada por la Asamblea General de Naciones Unidas el 10 de diciembre de 1948, los DDHH promueven la convivencia pacífica, el respeto y el civismo. Según De peña, “la base de una sociedad civilizada es el respeto a los derechos, en primer lugar, y luego el cumplimiento de los deberes”.
De no aplicarse de forma individual no se aplicarán de forma colectiva. Sin embargo, asegura De Peña, la mayoría de las personas no conoce los DDHH y relaciona el concepto con los derechos civiles y políticos.
“La gente -afirma- no sabe que a nosotros nos violan nuestros derechos constantemente”.
Cuando se nos vende una energía eléctrica a sobreprecio pero no se nos suministra se está violando el derecho a una vida sana. Cuando nuestros hijos reciben una enseñanza deficiente, aunque se otorgue el 4 por ciento del PIB a este renglón, se está violando su derecho a la educación. Cuando hay pobreza y hambre y cuando los hospitales carecen de insumos para atender a los pacientes, se están violando los derechos de los ciudadanos.
Sobre el Estado recae la responsabilidad de garantizar los derechos de sus ciudadanos y, sin embargo, “el Estado dominicano viola los derechos humanos de sus ciudadanos de manera constante”, asevera De Peña.
Lo más grave, en su opinión, es que lo hace sin que estos tengan conciencia de ello porque no saben cuáles son sus derechos.
Conocer los DDHH no asegura que estos no serán violentados, pero sí que la persona tiene en sus manos una herramienta para reclamarlos y defenderlos, y para no violar las prerrogativas de los demás.
“El Estado viola los derechos porque nosotros como individuos violamos los derechos constantemente”, expresa De Peña.
Los ciudadanos tienen la responsabilidad de contribuir al mejoramiento del Estado de derecho mediante el reclamo, la concientización y, sobre todo, la educación.
Educación
La directora del Museo de la Resistencia aboga porque se incluya la enseñanza de los DDHH como una asignatura -no como un conocimiento transversal- en el currículo escolar desde el nivel básico.
Cita el caso de Argentina donde han comenzado a evidenciarse cambios gracias a que la Comisión Nacional sobre la Desaparición de Personas, creada en 1983 y presidida por el escritor Ernesto Sabato, recomendó incluir en la enseñanza básica la asignatura Derechos Humanos y Memoria.
“La educación en derechos es primordial para el cambio de una sociedad”, señala De Peña.
El Museo Memorial de la Resistencia trabaja el tema en el nivel medio fruto de un convenio con el Ministerio de Educación, el cual subvenciona al museo, y por el cual docentes del área de Ciencias Sociales, así como estudiantes de media, reciben capacitación sobre el tema.
Desde que se iniciaron los talleres hace algo más de un año alrededor de 800 maestros han recibido capacitación en DDHH.
La institución también organiza un curso virtual en DDHH.
Cabral, quien se desempeña como facilitador del curso, dice que, aunque abierto a todo público, quienes más se interesan en el programa son docentes y personas que por su trabajo se beneficiarán de ese conocimiento.
Estos casos demuestran que “se está trabajando”, dice De Peña, “lo que pasa es que hay que profundizar más y hay que crear políticas públicas de DDHH”.
Avances
¿Ha avanzado República Dominicana en materia de DDHH? Los entrevistados consideran que sí.
“Podemos hablar de derechos, eso es un avance”, expresa De Peña.
Antes, por ejemplo durante la dictadura de Rafael L. Trujillo, no se podía hablar de este tema.
A pesar de eso, De Peña considera que no se ha avanzado “ni remotamente” lo que se debería.
Para demostrar este punto invita al ciudadano a hacer un ejercicio de reflexión: si transitaras por la calle a las 2:00 de la madrugada y un policía te ordenara detenerte ¿qué sentirías? Probablemente miedo.
Para De Peña, ese miedo implica que no valieron de nada los muertos de la resistencia antitrujillista; no hubo una transformación ni una “destrujillización” plena de las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional.
“Hay militares de carrera, hay gente decente dentro de las Fuerzas Armadas y la Policía que están luchando por una transformación, pero ni son la mayoría ni tienen la fuerza”, prosigue.
En su opinión, los movimientos de la sociedad civil que se han levantado en los últimos años representan una luz, pero sólo en parte. Habría que analizar cada uno de esos grupos de forma individual para así saber si los mueven intereses políticos partidistas o un genuino interés por el bien común.
Independientemente de los esfuerzos de los grupos de la sociedad civil, la directora del Museo de la Resistencia insiste en la educación como la mejor vía para el cambio.
Aunque si se invierte en educación ahora, tendría que pasar una generación completa antes de que empiece a evidenciarse una transformación en la sociedad.
“Tenemos que invertir ahora en educación para empezar a ver los cambios en 30 años”, concluye.
Día Internacional de los Derechos Humanos
Hoy se recuerda la aprobación de la Declaración Universal de los Derechos Humanos.
La siguiente versión simplificada fue tomada de Recursostic.educacion.es:
1. Todos nacemos libres e iguales
2. No a la discriminación
3. Derecho a la vida
4. No a la esclavitud
5. No a la tortura
6. Tienes derechos en todas partes
7. Todos somos iguales ante la ley
8. Tus derechos están protegidos por la ley
9. No a la detención ilegal
10. Derecho a un juicio justo
11. Todos somos inocentes hasta que se pruebe lo contrario
12. Derecho a la privacidad
13. Libertad de movimientos
14. Derecho a un lugar seguro para vivir
15. Derecho a una nacionalidad
16. Derecho a casarse y formar una familia
17. Derecho a la propiedad privada
18. Libertad de pensamiento
19. Libertad de expresión
20. Derecho de reunión
21. Derecho a la democracia
22. Derecho a la seguridad social
23. Derechos de los trabajadores
24. Derecho al descanso
25. Derecho a alimentación y vivienda
26. Derecho a la educación
27. Derecho a la cultura
28. Derecho a un mundo justo y libre
29. Deber de respetar los derechos de los demás
30. Nadie puede quitarte tus derechos humanos
Santo Domingo
Conocer los derechos humanos (DDHH) y apropiarse de ellos cambia a las personas. Así lo han comprobado Luisa de Peña y Francisco Cabral, directora general y facilitador, respectivamente, del Museo Memorial de la Resistencia, institución que promueve los DDHH y organiza cursos y talleres sobre el tema.
De Peña narra la anécdota de un empleado de conserjería que, tras la captura y apresamiento de dos carteristas en las instalaciones del museo, se dirigió al destacamento policial a poner la denuncia junto a otra empleada. Ya en el lugar, y al ver el trato vejatorio dado a los delincuentes, el empleado dio a quienes se encontraban en el destacamento una “charla” sobre DDHH.
“Eso -comenta De Peña sobre el episodio- quiere decir que él absorbió dentro de sí sus derechos y no tiene miedo de expresar y promover esos derechos en un lugar que es uno de los centros de mayores violaciones de derechos”.
Cabral, por otro lado, recuerda el caso de personas que llegan a los cursos de DDHH con un conocimiento prácticamente nulo sobre el tema y al finalizar las lecciones tienen la capacidad de analizar los hechos que los rodean y determinar qué derechos han sido violentados en cada caso. Se trata, dice, de un primer paso que los prepara para exigir sus derechos cuando deban hacerlo.
“Es sumamente importante que las personas conozcan qué son los DDHH, sobre todo porque son las herramientas básicas para defendernos en cualquier conflicto, mantener la paz y promover el bienestar”, afirma Cabral.
Desconocimiento
Contenidos en la Declaración Universal de los Derechos Humanos aprobada por la Asamblea General de Naciones Unidas el 10 de diciembre de 1948, los DDHH promueven la convivencia pacífica, el respeto y el civismo. Según De peña, “la base de una sociedad civilizada es el respeto a los derechos, en primer lugar, y luego el cumplimiento de los deberes”.
De no aplicarse de forma individual no se aplicarán de forma colectiva. Sin embargo, asegura De Peña, la mayoría de las personas no conoce los DDHH y relaciona el concepto con los derechos civiles y políticos.
“La gente -afirma- no sabe que a nosotros nos violan nuestros derechos constantemente”.
Cuando se nos vende una energía eléctrica a sobreprecio pero no se nos suministra se está violando el derecho a una vida sana. Cuando nuestros hijos reciben una enseñanza deficiente, aunque se otorgue el 4 por ciento del PIB a este renglón, se está violando su derecho a la educación. Cuando hay pobreza y hambre y cuando los hospitales carecen de insumos para atender a los pacientes, se están violando los derechos de los ciudadanos.
Sobre el Estado recae la responsabilidad de garantizar los derechos de sus ciudadanos y, sin embargo, “el Estado dominicano viola los derechos humanos de sus ciudadanos de manera constante”, asevera De Peña.
Lo más grave, en su opinión, es que lo hace sin que estos tengan conciencia de ello porque no saben cuáles son sus derechos.
Conocer los DDHH no asegura que estos no serán violentados, pero sí que la persona tiene en sus manos una herramienta para reclamarlos y defenderlos, y para no violar las prerrogativas de los demás.
“El Estado viola los derechos porque nosotros como individuos violamos los derechos constantemente”, expresa De Peña.
Los ciudadanos tienen la responsabilidad de contribuir al mejoramiento del Estado de derecho mediante el reclamo, la concientización y, sobre todo, la educación.
Educación
La directora del Museo de la Resistencia aboga porque se incluya la enseñanza de los DDHH como una asignatura -no como un conocimiento transversal- en el currículo escolar desde el nivel básico.
Cita el caso de Argentina donde han comenzado a evidenciarse cambios gracias a que la Comisión Nacional sobre la Desaparición de Personas, creada en 1983 y presidida por el escritor Ernesto Sabato, recomendó incluir en la enseñanza básica la asignatura Derechos Humanos y Memoria.
“La educación en derechos es primordial para el cambio de una sociedad”, señala De Peña.
El Museo Memorial de la Resistencia trabaja el tema en el nivel medio fruto de un convenio con el Ministerio de Educación, el cual subvenciona al museo, y por el cual docentes del área de Ciencias Sociales, así como estudiantes de media, reciben capacitación sobre el tema.
Desde que se iniciaron los talleres hace algo más de un año alrededor de 800 maestros han recibido capacitación en DDHH.
La institución también organiza un curso virtual en DDHH.
Cabral, quien se desempeña como facilitador del curso, dice que, aunque abierto a todo público, quienes más se interesan en el programa son docentes y personas que por su trabajo se beneficiarán de ese conocimiento.
Estos casos demuestran que “se está trabajando”, dice De Peña, “lo que pasa es que hay que profundizar más y hay que crear políticas públicas de DDHH”.
Avances
¿Ha avanzado República Dominicana en materia de DDHH? Los entrevistados consideran que sí.
“Podemos hablar de derechos, eso es un avance”, expresa De Peña.
Antes, por ejemplo durante la dictadura de Rafael L. Trujillo, no se podía hablar de este tema.
A pesar de eso, De Peña considera que no se ha avanzado “ni remotamente” lo que se debería.
Para demostrar este punto invita al ciudadano a hacer un ejercicio de reflexión: si transitaras por la calle a las 2:00 de la madrugada y un policía te ordenara detenerte ¿qué sentirías? Probablemente miedo.
Para De Peña, ese miedo implica que no valieron de nada los muertos de la resistencia antitrujillista; no hubo una transformación ni una “destrujillización” plena de las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional.
“Hay militares de carrera, hay gente decente dentro de las Fuerzas Armadas y la Policía que están luchando por una transformación, pero ni son la mayoría ni tienen la fuerza”, prosigue.
En su opinión, los movimientos de la sociedad civil que se han levantado en los últimos años representan una luz, pero sólo en parte. Habría que analizar cada uno de esos grupos de forma individual para así saber si los mueven intereses políticos partidistas o un genuino interés por el bien común.
Independientemente de los esfuerzos de los grupos de la sociedad civil, la directora del Museo de la Resistencia insiste en la educación como la mejor vía para el cambio.
Aunque si se invierte en educación ahora, tendría que pasar una generación completa antes de que empiece a evidenciarse una transformación en la sociedad.
“Tenemos que invertir ahora en educación para empezar a ver los cambios en 30 años”, concluye.
Día Internacional de los Derechos Humanos
Hoy se recuerda la aprobación de la Declaración Universal de los Derechos Humanos.
La siguiente versión simplificada fue tomada de Recursostic.educacion.es:
1. Todos nacemos libres e iguales
2. No a la discriminación
3. Derecho a la vida
4. No a la esclavitud
5. No a la tortura
6. Tienes derechos en todas partes
7. Todos somos iguales ante la ley
8. Tus derechos están protegidos por la ley
9. No a la detención ilegal
10. Derecho a un juicio justo
11. Todos somos inocentes hasta que se pruebe lo contrario
12. Derecho a la privacidad
13. Libertad de movimientos
14. Derecho a un lugar seguro para vivir
15. Derecho a una nacionalidad
16. Derecho a casarse y formar una familia
17. Derecho a la propiedad privada
18. Libertad de pensamiento
19. Libertad de expresión
20. Derecho de reunión
21. Derecho a la democracia
22. Derecho a la seguridad social
23. Derechos de los trabajadores
24. Derecho al descanso
25. Derecho a alimentación y vivienda
26. Derecho a la educación
27. Derecho a la cultura
28. Derecho a un mundo justo y libre
29. Deber de respetar los derechos de los demás
30. Nadie puede quitarte tus derechos humanos
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