Texas ejecuta a un pandillero latino por el asesinato de un policía en 2001
Austin (EEUU) El estado de Texas (EEUU) ejecutó ayer al pandillero latino Licho Escamilla, condenado a muerte por el asesinato del policía Cristopher James en Dallas en el año 2001. A Escamilla, de 33 años, lo declararon muerto a las 18.31 hora local (23.31 GMT) tras recibir una inyección letal en la prisión de Huntsville (Texas), según informó el Departamento de Justicia Criminal de ese estado sureño. Sus últimas palabras fueron: "El papa Francisco, el enviado de Dios, pidió al estado de Texas conmutar mi pena de muerte por una cadena perpetua. Pero el estado de Texas ha rechazado escuchar al enviado de Dios y se las tendrá que ver con el propio Dios. Que todo el mundo sepa que esto no ha terminado". Según testigos de la ejecución, su hermana gritó "¡Licho no te vayas!" mientras Escamilla quedaba inconsciente. Como es habitual con los asesinos de policías, compañeros de James acudieron a Huntsville e hicieron rugir los motores de sus motocicletas mientras Esc...